
Por: @carlos_montivero_

Cada vez que Robert Smith sale por algún momento del anonimato que siempre lo ha caracterizado, la fanaticada mundial de The Cure reacciona emocionalmente y en cosa de minutos, la información se transmite como si de palabra sagrada se tratara. Y es que The Cure es para muchos, no solo música sino casi una religión; o un lugar a donde pertenecer sin importar quien seas.
Hace unas semanas, Smith encendió las redes sociales y a través de su cuenta de Twitter anunciando fechas como parte de su gira mundial -Shows of a Lost World 2023 – en siete
países del cono Sur, entre ellos Chile. La emoción y expectación fue inmediata y comenzaron los re-posteos a través de las redes sociales. Aunque no hay fecha definida, la información entregada por el músico indica que definitivamente en algún momento del 2023, The Cure volverá a tocar en Chile, esperemos más de un concierto.
Sabemos que al vivir tan lejos, al fin del mundo, siempre es complejo que muchas bandas incluyan en sus giras mundiales un paso por Chile. La logística para mover un artista del tamaño de The Cure es enorme. Backline o equipamiento que usualmente este tipo de bandas transporta de forma única ya que de otra forma, sería sacrificar su sonido que define su trabajo por años; staff técnico, muchas veces incluso el escenario que es parte de la puesta en escena debe ser transportado, incrementando los costos para las productoras que apuestan por traer artistas a nuestro país.
La última venida de The Cure a Chile fue el 14 de Abril del 2013 en donde se presentaron
en un Estadio Nacional abarrotado, en un concierto que recorrió la historia de la banda inglesa a través de 42 canciones. Recuerdo que hace un par de semanas antes me había
mudado a Santiago y tenía entradas compradas para asistir al ansiado concierto. Para hacer la historia corta, tuve que conformarme con escucharlo desde mi balcón del
departamento en que vivía a pocas cuadras del Estadio ya que la mudanza me dejó sin
nada de energía ni siquiera para salir de casa. En fin, eso es otra historia.
Mientras esperamos la confirmación de la fecha y lugar exacta de la próxima venida de The Cure a Chile, podemos quedarnos con algo del trabajo reciente de Smith, que como músico inagotable y silencioso continúa colaborando con diversos artistas y que recientemente apareció en sencillos tales como “Strange Timez” de Gorillaz el 2020 y más recientemente con “How not to drown” de Chvrches el 2021.
Por Carlos Montivero: